Gracias a una acción conjunta entre las Seremis de Bienes Nacionales y Obras Públicas, Gobierno Regional y Consejo de Monumentos Nacionales, se dio un importante paso para la puesta en valor del complejo arqueológico del Cerro Unita, compuesto por una treintena de geoglifos además del Gigante.
Se procedió a la remoción de escombros que permanecían en el lugar desde 2013, tras la fallida construcción de un muro perimetral. A la vez se anunció una próxima convocatoria a entidades para convertirse en los próximos administradores del sitio patrimonial.